La crecida del río Amana durante el pasado fin de semana afectó unas 200 viviendas en tres sectores del sur de la ciudad de Maturín, estado Monagas.
La comunidad más afectada resultó Amana Abajo, donde residentes manifestaron que perdieron sus cosechas y que suspendieron temporalmente los servicios públicos.
“Se nos metió ese río y es lodo lo que tenemos”, “se perdió la yuca, la auyama, la patilla, el melón, todo eso”, dijeron respectivamente Inés Aristimuño y Ventura Mosqueda, afectados.
Recalcaron que la escuela básica Josefa Camejo, de la zona, se inundó, por lo que tuvieron que suspender las clases.
“Gracias a Dios que vino la crecida y ya. No hubo pérdidas humanas. Lo que tengo son unas gallinas”, afirmó Lesbia Leonett.
Habitantes de Amana Abajo, en Maturín, solicitan a las autoridades competentes que activen una jornada médica y de fumigación para evitar que niños y adultos mayores enfermen por el agua estancada.
Información y foto: Unión Radio
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