Las federaciones de Estados Unidos y México han anunciado que retirarán su candidatura conjunta para albergar la Copa Mundial Femenina de fútbol en 2027, centrándose en su lugar en buscar ser sede del torneo en 2031.
La decisión de ambos países pone en competencia a Brasil y un proyecto conjunto entre Alemania, Holanda y Bélgica para la sede de 2027, que será decidida en el Congreso de la FIFA el 17 de mayo en Bangkok.
La Federación Estadounidense ha destacado que su candidatura para 2031 buscará que la FIFA invierta de manera equitativa en las Copas del Mundo masculinas y femeninas. Esto surge en un contexto donde la FIFA destinó una cantidad considerablemente mayor en premios para la Copa del Mundo masculina de 2026 en comparación con el Mundial femenino del año pasado.
Cindy Parlow Cone, en un comunicado, mencionó que cambiar la candidatura permitirá organizar una Copa Mundial Femenina sin precedentes en 2031, con el objetivo de impulsar el crecimiento y elevar el nivel del fútbol femenino a escala nacional e internacional.
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