Novak Djokovic se tocó la oreja para pedirle más aliento al público luego que el campeón de 24 torneos de Grand Slam alcanzó una pelota casi perdida y se llevó un improbable punto.
En lugar de propulsar una reacción, resultó ser la última acción desesperada de Djokovic al sucumbir en sets corridos ante Matteo Arnaldi en su primer partido del Abierto de Madrid el sábado.
El serbio de 37 años lleva tres derrotas seguidas. Perdió la final de Miami ante Jakub Menšík y luego contra Alejandro Tabilo en el Masters de Montecarlo, claramente a los tumbos en el inicio de la gira de arcilla rumbo al Abierto de Francia el próximo mes.
Arnaldi cantó victoria 6-3, 6-4 y Djokovic seguirá esperando por el título número 100 de su carrera. ¿La clave? Djokovic totalizó 32 errores no forzados contra 18 de Arnaldi, amén de sufrir tres quiebres de saque.
“Mi nivel de tenis sigue sin estar donde me gustaría”, dijo Djokovic. “Es lo que hay. He perdido contra alguien superior”.
“Es una nueva realidad para mí, tengo que reconocerlo”, reflexionó. “Busco ganar un partido o dos, sin ponerme a pensar que tengo que llegar lejos en los torneos. Es una sensación completamente diferente a la que he tenido durante más de 20 años en el circuito. Algo diferente en la pista. Supongo que se trata del ciclo de la vida. Tenía que pasar en algún momento”.
Información: AP
Foto: Agencias
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