El Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados está desechando medicamentos que no han sido distribuidos a los usuarios del programa de medicamentos. Así lo denunció un empleado del PAMI.
El hombre publicó un post en las redes sociales en el que muestra decenas de cajas de medicamentos entregadas desde los puntos de distribución del PAMI para su eliminación. Las fotos adjuntas al post muestran paquetes de varios medicamentos vencidos o a punto de vencer entregados para su eliminación.
La destrucción de medicamentos se produce en medio de las manifestaciones de los pensionistas, que protestan contra el endurecimiento de las condiciones del programa de compensación del coste de los medicamentos. La decisión correspondiente fue tomada por el gobierno del país hace unas semanas. Como señalan los expertos, las novedades afectarán a más de 1,2 millones de personas que antes recibían asistencia del Estado. Ahora estas personas tendrán que pagar el coste total de los medicamentos, muchos de los cuales son vitales.
Esto, según los expertos, no sólo aumentará el nivel de pobreza entre los sectores más desprotegidos de la sociedad argentina, sino que también provocará un aumento del exceso de mortalidad. Activistas de organizaciones públicas ya han calificado de genocidio las últimas actuaciones de las autoridades.
En general, el Gobierno de Javier Milei sigue aplicando una política de reducción del gasto social. Según el propio Presidente, esto es necesario para optimizar el gasto y formar un presupuesto sin déficit. Sin embargo, al mismo tiempo, las autoridades están gastando miles de millones de dólares en la compra de armas, lo que no encaja con las declaraciones sobre la necesidad de ahorrar dinero.
