Dra. Mirecly Guzmán Ramos
Cada 17 de mayo se conmemora el Día Mundial de la Hipertensión con la finalidad de promover la concienciación sobre la prevención, diagnóstico y control de la Hipertensión arterial, definiéndose esta como la elevación de las cifras de presión arterial de forma continua o sostenida en el tiempo, en un rango de mayor o igual a 140-90 mmHg.
Se le considera un enemigo silencioso porque muchas veces no se presenta ningún síntoma (estando ya elevadas, estos valores de presión arterial), pero aún así va produciéndose daño a nuestros órganos.
Para entenderlo mejor es importante definir el concepto de la presión arterial. El corazón de manera normal ejerce presión sobre las arterias para que éstas conduzcan la sangre hacia los diferentes órganos del cuerpo humano. Esta acción es lo que se conoce como presión arterial (PA). La presión máxima se obtiene en cada contracción del corazón (presión arterial sistólica) y la mínima, con cada relajación (presión arterial diastólica).
Según datos de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), la hipertensión es el principal factor de riesgo para sufrir una enfermedad cardiovascular, y cada año ocurren 1.6 millones de muertes por enfermedades cardiovasculares en la región de las Américas, de los cuales alrededor de un millón son personas menores de 70 años, lo cual se considera una muerte prematura y evitable.
La hipertensión arterial afecta entre el 20-40% de la población adulta de la región y significa que en las Américas alrededor de 250 millones de personas padecen de presión alta. La buena noticia es que la hipertensión arterial se puede prevenir con unas sencillas intervenciones como: reducción del consumo de sal; consumir una dieta rica en vegetales, frutas y verduras, realización de actividad física regularmente, no fumar, mantener un peso estable, entre otros, y una vez ya establecido el diagnostico esta puede mantenerse controlada con esas mismas intervenciones y con el uso de medicamentos específicos.
De esto se deriva la importancia de asistir regularmente a consulta con tu médico, así como también conocer nuestros números de presión arterial habituales, a través de la medición de la presión arterial en casa, con lo cual se podrá detectar precozmente cuando haya una elevación de la misma y actuar antes que se produzca daños a los órganos dianas de la hipertensión como lo son: el cerebro, los ojos, el corazón, los riñones y los vasos sanguíneos.
Para finalizar te hago esta pregunta: ¿Cuándo fue la última vez, que te mediste la presión arterial?
Por la Dra. Mirecly Guzmán Ramos
Medicina Interna/Cardiología Clínica.
Fundadora del RCP Tour Venezuela.
(Programa Comunitario para la enseñanza de la RCP y uso del DEA).
