Tenaz, centrado, recto y apasionado son algunos de los adjetivos que describen a Salvador Castillo, un periodista a carta cabal que ha dejado huellas imborrables en Carabobo.
Su transitar por el periodismo comenzó cuando era un muchacho. Mientras cursaba bachillerato en el liceo Pedro Gual de Valencia se desempeñó como jefe de redacción del mensuario El Sol y desde entonces no se separó de esta profesión.
Aunque la mayor parte de su carrera se vincula a la prensa escrita, Castillo también narró noticieros radiales por muy poco tiempo.
«Realmente mi voz no era muy buena para eso», reconoció el profesional de la comunicación, quien tuvo la oportunidad de compartir cabina con locutores emblemas de la región como Carlos Bello.
También tuvo experiencia en el Diario Hoy de Valencia, el primer periódico offset de Venezuela, junto con La Verdad de Caracas.
UN PERIODISTA SE CONOCE EN LA FUENTE DE SUCESOS
En entrevista para «En Conexión con las Historias de Vida« de Radio América, Castillo rememoró cómo fue su llegada a El Carabobeño, donde estuvo por casi cuatro décadas.
«Miguel Colombet, un tremendo periodista, escritor e historiador del periodismo de Carabobo y César Vita, creador de los célebres mini anuncios de El Carabobeño, me llevaron al diario con un sueldo atractivo para la época: 800 bolívares y una camioneta asignada», recordó.
Para el momento cubría sucesos, a su juicio «la principal fuente para conocer un periodista», porque permite que el comunicador social desarrolle su capacidad de leer la realidad, hacer trabajo de investigación y ejercer con honradez, «la fase primordial del periodismo».
LA ESCUELITA DE SALVADOR CASTILLO
Los conocimientos de Salvador Castillo han transcendido a muchas generaciones de periodistas, que lo recuerdan como un maestro de la sala de redacción en El Carabobeño.
«A mí siempre me ha gustado enseñar. Yo corregí, corregí, corregí, corregí, tiré muchas cuartillas en el cesto de la basura. Los muchachos se calentaban conmigo. Pero al final, ellos entendieron cuál era mi misión, la misión de ellos y la aceptaron», destacó.
A su criterio, el periodista que tiene más éxito es el que estudia y lee. De lo contrario, «será un fracasado para toda la vida».
«Tiene que leer todos los días y eso sin meter ahora que tiene que estar al día con todos los avances tecnológicos. Yo conocí muchos periodistas que no leían ni lo que escribían y yo les enseñé a escribir y a leer lo que ellos me escribían y me lo han dicho después», evocó.
Además, el profesional considera que la credibilidad es la esencia del periodismo.
SUS PASOS EN RADIO AMÉRICA
La relación de Salvador Castillo con Radio América data de muchas décadas gracias a su amistad con el empresario Arturo Del Valle Cueto, a quien acompañó durante el proceso de compra de la emisora.
«Arturo Del Valle apoyó toda la iniciativa del personal que había aquí y, por supuesto, la de los locutores. Su gran éxito, su gran misión, es haber tenido la visión de comprar la estación, ponerla al servicio de la colectividad y de seguir la línea editorial que tenían los antiguos propietarios», subrayó.
Actualmente, Castillo es el vicepresidente de la «Onda de la Alegría», que se mantiene, de acuerdo a las últimas encuestas públicas, como la primera en sintonía en la entidad y ha logrado captar a un público nuevo.
Para el periodista esto se debe a que una de las zonas de gran audiencia, como es el sur de Valencia, ha experimentado una transformación.
«Los técnicos financieros dicen que en el sur de Valencia se mueve mucho más dinero. Ese mito de zona sur y zona norte prácticamente se está acabando, porque los muchachos han ido a la universidad y se han convertido también en promotores culturales, en emprendedores. Es decir, que el sur de Valencia es una nueva ciudad».
EL PERIODISMO DE HOY
Castillo cree que las redes sociales son vitales para el periodismo de la actualidad, pero estas deben regularse.
«Hay un teórico de la comunicación, llamado Umberto Eco, un italiano que es muy estudioso, que decía que cualquier vecino que escribe con un celular ya se cree un premio Nobel de literatura».
Al respecto, resaltó que el periodista tiene que ser responsable, honrado consigo mismo, con lo que escribe y lo que autoriza que se divulgue.
Información y foto: Radio América
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