La industria camaronera venezolana ha crecido exponencialmente en los últimos 25 años y actualmente, el sector exporta alrededor del 95% de su producción.
Según Arnaldo Figueredo, director ejecutivo de la Sociedad Venezolana de Acuicultura, actualmente hay más de 19.000 hectáreas de estanques camaroneros en todo el país, repartidas en unas 700 explotaciones. Sin embargo, la mitad de estos estanques están cerrados o no funcionan, indica Banca y Negocios.
Once empresas camaroneras venezolanas están certificadas por el Aquaculture Stewardship Council, uno de los principales organismos mundiales de certificación del sector.
El biólogo marino Robert Tenia, jefe de producción entre 2018 y 2022 de Inmarlaca, la mayor camaronera de Venezuela vio cuatro visitas de certificadores.
«Comprobaron las condiciones de trabajo, dónde dormían los trabajadores, cómo eran los comedores, el estado de los manglares circundantes, los filtros de reposición de agua y que no hubiera fugas de animales de las piscinas a zonas naturales», explica a Mongabay, un portal especializado en ecología y sostenibilidad.
En 2023, el camarón representó el sexto mayor volumen de exportación de productos básicos de Venezuela por valor, con 214 millones de dólares.
Los principales destinos fueron Holanda, Francia y España, aunque el mercado de mayor crecimiento es China; las exportaciones a ese país pasaron de 15,6 millones de dólares en 2021 a 32,8 millones en 2022.
El economista Asdrúbal Oliveros, presidente de Ecoanalítica, destacó que el sector camaronero se ha convertido en un área clave para la economía venezolana «y un oferente relevante en el mercado de divisas».
Con información de Banca y Negocios
Foto: Referencial