El problema de las aguas negras desbordadas no deja de preocupar a comunidades y a los transeúntes de Puerto Cabello, donde caminar, o andar en motos, representa estar expuesto a las diferentes bacterias que se pueden generar en estas aguas contaminadas.
Durante un recorrido por el centro de la ciudad, se lograron detectar varias calles con aguas negras estancadas, como en el caso de la concurrida calle Urdaneta, corazón comercial de la ciudad, donde, aunado al deterioro de la vía por esta situación, las personas deben caminar con mucha precaución.
Arelis Parra, habitante de Puerto Cabello, indicó que “todos los días voy al centro por mi trabajo, es imposible usar sandalias porque hasta hongo uno agarra, entonces los vehículos pasan sin ver que chispean al que va caminando”.
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Foto: Luisana Peña
